Gayola y su grito de guerra: “Pvta Policía”
lunes, abril 21, 2025 | Musical trends
En un momento donde la música vuelve a ser el altavoz de los que no tienen voz, aparece Gayola con un rugido que sacude conciencias: “Pvta Policía”, un tema que es mucho más que una canción. Es un estallido de rabia, una denuncia social disfrazada de riffs contundentes y líricas incendiarias.
Desde la calle y para la calle, Gayola no pretende faltar el respeto, pero sí poner el dedo en la llaga: la constante persecución a jóvenes por pequeñas dosis de sustancias mientras los verdaderos hilos del tráfico y la corrupción se mueven impunes desde esferas mucho más altas. “Queremos que se miren el ombligo y dejen de perseguir a los jóvenes, y se centren en lo realmente importante”, declaran sin rodeos.
Punk con alma, grunge con conciencia
Musicalmente, Gayola es un viaje sonoro directo a la mejor época del punk de los 2000, pero con una identidad propia, fresca y sin filtros. El bajo golpea con fuerza, la batería traza una ruta contundente y precisa, y la guitarra melódica se convierte en una especie de hilo conductor que atrapa desde el primer segundo.
La producción, cruda y sin adornos innecesarios, refleja fielmente lo que son: una banda autogestionada, auténtica y comprometida con lo que canta. En “Pvta Policía”, incluso el sintetizador, sutil pero decisivo, construye un paisaje sonoro que enriquece el mensaje sin robarle protagonismo.
Emergentes, pero no por mucho tiempo
Gayola está en plena ebullición. Han comenzado a cerrar fechas en algunos de los festivales más importantes de España, y este podría ser ese momento bisagra entre lo emergente y lo consolidado. Su campaña con este tema busca precisamente eso: visibilidad. Quieren y merecen ser escuchados.
Desde esta revista, apostamos por proyectos con discurso, actitud y talento, y Gayola lo tiene todo. Su música no solo suena: resuena, remueve, incomoda… y eso, en los tiempos que corren, es más necesario que nunca.
Si aún no los has escuchado, hazte un favor y ponles play. Prepárate para una descarga de honestidad brutal, distorsión bien dirigida y una propuesta que combina lo mejor del pasado con la urgencia del presente.
